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Mostrando entradas de febrero, 2020

Mi madre me visita en forma de mariposa, pero no blanca, sino multicolor

La mariposa salió a la luz de ese inmenso jardín, y abrió sus alas aterciopeladas; con ese despliegue, me senté en el banco blanco, debajo del rosal, observando las amapolas rojas, naranjas. Para cuando se posó en una, yo la observé y vi que era una pequeña hada de color fucsia y azul. Sus alas eran turquesas y verde esmeralda y me pareció que tenía un cabello color rojo rubí. La miré, y sus pequeñas patas se frotaban entre sí, con un chisporroteo de brillantes polvos mágicos que atravesaban el aire, con su nácar inmaculado. Alli me quedé, con ella revoloteando sin pensar en nada. Solo en esa calma inesperada y sencilla, y de pronto se me vino a la mente mi madre, que me sonreía desde su sonrisa santa. De esa manera pensé que "Galito", así le decían a mi mamá, era mi hada madrina y llego a visitarme en forma de mariposa. Yo siempre pensé que las mariposas que volaban a nuestro alrededor sin motivos,  eran los difuntos, y eran blancas. Eso me enseñaron desde niña y así lo

Cartas de amor

"Querido amor mío:          Llueve copiosamente en la ciudad. De pronto todo está oscuro y frío. La humedad inunda todos los cuartos y pese a que he prendido la calefacción, mi alma está fría y suda como tiritando en fuego. Es tanto el amor que me quema y me hiela el alma. Si no vuelves, ya no podré respirar ni reír ni amar más. Será la peor agonía de mi vida presente. No quiero que me olvides, quiero que mi voz se pegue en tu oído, y mis manos te recorran el cuerpo como a un camino sin fin y que inexorable, me recuerdes a cada instante. Mi boca, mi cuello mis manos, todo mi ser. Si, así de terca me pongo cuando pienso en que ya no estaremos juntos y tu boca será besada por otra, y tus abrazos serán sobre una cintura diferente a la mía. Mi amor me aturde, ya no se si quema o congela. Me siento en un eterno sufrimiento donde el cuerpo no responde y la mente está en el infierno de los muertos en vida. Ahora mismo ardo en deseos sin sentido. Mi piel negra por el fuego y el h